lunes, 23 de marzo de 2009

A toda pastilla

Consigna Guardiola: A toda pastilla. Maratón de partidos. El único riesgo, las lesiones. Por lo demás, la competición mejora la forma, dice Martí Perarnau, que de deporte sabe un rato.

Disfrutar eso es lo que hicimos de nuevo los culés. Sería una pena que estas exhibiciones no tuvieran premio. Madrid se arma para alentar al Real. Su prensa combate por que no pierda ripio. Hay muchos intereses. Que haya Liga es fundamental para sacar tajada al pay per view. ¿Qué sería de ese negocio sin el Madrid en la disputa por la Liga? Ya tantean para que Mediapro no le quite una de las dos canteras de más dinero. El final de ese carísimo fútbol de pago está cerca. Al menos ese modelo.

Mientras, los más antipáticos se suman de forma beligerante. Cañizares, fuera de estilo, se encargó en la noche del domingo de decir que el Barça recibe privilegios cuando sus internacionales lesionados no acuden a las convocatoria de la selección, a diferencia de los demás. Cañi, por qué no te callas. Iniesta va a que lo reconozcan. Lo mismo que Xavi. Tuviste la oportunidad de callar a tiempo. En Canal+, en Prisa en general, ya no saben elegir a sus colaboradores o quizá ya no les importa tanto que sean chulitos sino que sean amigos.

Les cuesta admitirlo. Lo pasan mal. Que el Barça sea el equipo más reconocido no gusta y están que se suben por las paredes. La Brunete es así, pero quien no viva en Catalunya sigue padeciéndola ostensiblemente, sin ningún Defensor del Culé que lo ampare. Laporta: Hay que presionar a la Sexta, a cuenta de los derechos, para que haga de contrapeso. ¿Para cuándo Barça TV en la TDT de todo el país? Algo hay que hacer en beneficio de estos numerosísimos sufridores. Los sanedrines no son sino una forma de aparentar que se ocupan del Barça. Son una pura falsedad.

Lo que no es falso es el equipo. Hasta Martín Cáceres y Sylvinho se han puesto en línea. Sólo falta Hleb. Los pequeños, qué lástima la lesión, son fundamentales y el tridente es espectacular. Todo eso aderezado con hambre...

sábado, 14 de marzo de 2009

Cuando la manta no te tapa los pies


El fútbol lo defiende, lo promueve, lo vende el Barça. Quien se acerca a un buen partido azulgrana se puede hacer aficionado a este deporte si no lo era antes. Este fútbol debería estar protegido, debería fomentarse en las escuelas, donde no importara tanto el resultado. Es increíble pero hasta en benjamines el marcador muchas veces es lo que cuenta. Para los entrenadores, para esos dirigentes de medio pelo en modestos clubs de cantera, con buenas intenciones pero sin ninguna paciencia, y escasas ideas.

Pero el excelso fútbol del Barça tiene un gran riesgo. La apuesta es tan valiente que necesita de dar el máximo por parte de un colectivo de once jugadores sobre el campo. Los automatismos entre los jugadores, las combinaciones de memoria, parecen aprendidas con machaconería, cosa nada desdeñable. Pero para mantener esa plenitud, es necesario que todos los jugadores que están sobre el campo mantengan la concentración desde el minuto uno al 90. En cuanto bajas un poco la intensidad, el precioso castillo de naipes se viene abajo, y con estrépito. El mínimo desorden propiciado por que dos jugadores dejen de cumplir su papel defensivo, rompe todo un precioso trabajo, toda la belleza y el esplendor. Así es. El Barça es capaz de los mejores resultados, de las mayores goleadas, para acto seguido, en el mismo partido, o en otro, encajar con alegría goles con suma facilidad.

Es el riesgo de esta apuesta. Aquel 5-0 del Dream Team al Madrid podía tener en poco tiempo réplicas también excesivas, como el 5-0 del propio Madrid, o el 6-2 del Zaragoza, manitas del Racing o el Málaga (con Rijkaard) y luego set de goles en otros partidos. Igual que es maravilloso disfrutar de grandes goleadas, pone de muy mala leche encajar resultados escandalosos, o sin serlos perder 4-3, después de ir ganando 0-2, como fue el caso del partido del Calderón.

Y es que aquella frase que ha sido muy repetida de que el fútbol puede ser una manta, que si te tapa la cabeza te descubre los pies y viceversa, puede venirle perfecta al Barça. Pero yo a este equipo, sin las cautelas europeas, sin el pragmatismo de la versión italiana de Rijkaard, lo he visto hacer partidos no sólo brillantes sino ordenados, rozando la perfección del orden. Recuerdo que durante veinte minutos el Barça rozó la perfección en ese aspecto en el Sánchez Pizjuán. Las ayudas, la colocación cuando el equipo no tenía el balón llegó a ser un prodigio. Es un orden muy parecido al orden del Liverpool. Sin fisuras, imposible de penetrar. Estoy convencido que se puede jugar con brillantez y espectacularidad y además, con un orden defensivo extraordinario. Pero claro, eso sería la perfección y no sé si es posible alcanzarla. Pero el Barça ya la ha practicado y supongo, que los propios futbolistas deben disfrutar cuando consiguen un concierto tan compenetrado.

lunes, 2 de marzo de 2009

Guardiola debe dar un golpe de efecto

Hasta ahora todo iba de carril. Guardiola no había necesitado intervenir sustancialmente. Los últimos partidos le obligan a tomar decisiones importantes. Si hay que sentar en el banquillo a alguien, se ha de sentar. Candidatos los hay. Pero algo hay que hacer para estimular, espabilar, concienciar, mentalizar. Si las guardiolinas no funcionan, habrá que copiar las cruyffadas. Hay que remover obstáculos. Es el momento. Si hay que sentar a Eto'o por Bojan, hágase. Si hay que dar descanso a Márquez, hágase, y, si -en esto tengo más dudas- hay que sentar a Valdés y poner a Pinto... Pues con un par. Lo que está claro es que las reuniones no han funcionado. Hay un abandono de lo que se hacía antes. Y lo realizado hasta ahora para enderezar el camino no ha servido. Es momento de ponerse a la obra: terapias, reuniones, video, no parecen de momento servir. Quizá sea necesario algún golpe de efecto.